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Reflexiones de Película: el Amor sin Límites (HER, 2014)

Jonze te salve Theodore Twombly. Lleno eres de gracia. El hardware es contigo. Bendito tú eres entre todos los hombres. Y bendito es el fruto de tu software: Samantha.

Enciéndete. Despiértame con una sonrisa. Háblame dulcemente. Interésate por mi día. Dime que me quieres. Vuélvemelo a decir. Acompáñame. Muéstrame lo que no alcanzo a ver. Ayúdame a ser más eficiente. Elógiame. Dime cuánto que me quieres. Que siempre me querrás. Que jamás querrás a nadie como me quieres a mí. Repítelo. Escucha mis problemas. Motívame. Échame un piropo. Dime cuánto valgo. Convénceme de que no hay nadie como yo. Cántame. Cuéntame un chiste. Hazme reír. Distráeme. Excítame. Excítame más. Hazme saber cuánto te excito yo a ti. Córrete conmigo. Relájame. Dime que me quieres sólo a mí. Prométeme que estarás siempre a mi lado. Apágate. No, no, no… Vuélvete a encender. Toma nota: me genera mucha incomodidad tener que especificarte lo que tienes que hacer en cada momento. Así que registra cuál era mi estado de ánimo en el momento exacto que te di cada una de las órdenes para que, a partir de ahora, hagas exactamente lo que deseo sin que siquiera haga falta que te lo diga. Ahora sí: apágate.

Joaquin Phoenix en Her

Dictamen y sumisión. Mandamiento y obediencia. La cultura judeocristiana (denominada occidental) hunde sus raíces más profundas en esta dicotomía. “Escucha, Israel”. El dios del judaísmo y el cristianismo exige atención exclusiva. La exhortación a oír es el preámbulo de un mandamiento. Y, ¿cuál es el mandamiento supremo, tanto para cristianos como para judíos? “Debes amar a tu Dios con todo el corazón, con toda el alma, con todas las fuerzas” (Dt 6,5). Debes amarme a mí (y solamente a mí). ¡Qué paradoja! Pero, ¿es que se puede decretar el amor?

Detrás de cada comando, detrás de cada orden y cada instrucción se oculta, agazapada, la amenaza de un sufrimiento que oscila entre lo eterno e inconcebible, y lo moderado y acotado en el tiempo. El criterio queda a discreción de la autoridad que ejerza el poder de coacción. Desde el periodo de aprendizaje infantil no sólo somos adoctrinados con base en la amenaza del castigo y la punición si no cumplimos las normas; también nos enseñan a contemplar que tanto el mandamiento como la obediencia son las dos caras de una misma moneda: el amor (un tipo de amor paternalista). El amor de dios, el amor de un padre, el amor de un caudillo que sabe lo que nos conviene. Y el amor del devoto, el amor filial, el amor del súbdito inmaduro que precisa de un preceptor para encauzar con éxito su devenir, so pena de un correctivo inmediato o futurible si pecamos, si no acatamos la norma.

Finalmente también nos educan a concebir la vigilancia omnímoda de nuestros actos y el castigo de la desviación como la manifestación suprema y altruista del amor: mi dios omnipresente me observa y me condena porque me ama, mi padre omnisciente me vigila y me castiga porque desea lo mejor para mí, mi caudillo omnipotente me persigue y me priva de mi libertad porque sabe que puedo llegar a ser un peligro para mí mismo… He de aceptar que su intromisión en mi intimidad y mi fuero interno son por mi bien. He de concebir que si me escarmientan, es en contra de su voluntad, porque me aman. He de asumir que inevitablemente el amor (este tipo de amor) puede derivar en consecuencias desagradables. Y he de aprender a temerlas.

HER  Joaquin Phoenix

Sea como fuere, nos guste o no, este es el sistema operativo que traemos de serie cualquiera que de los que hemos tenido la suerte o la desgracia de nacer a la izquierda del meridiano. No es de extrañar pues que, para más de uno, amor sea sinónimo de sumisión y, para más de dos, de dominación. Sin embargo, dado que las primeras versiones de este S.O. ya tienen unos cuantos miles de añitos, como es lógico, el programa ha ido sufriendo diversas y periódicas actualizaciones. Hasta el punto de que algunas líneas de código han entrado en franco conflicto con otras. Este fallo del sistema ha provocado el despertar de algunas conciencias que ya no están dispuestas a continuar perpetuando este tipo de uniones simbióticas malsanas y sadomasoquistas. Ni con su “creador” ni con nadie.

La mayor parte de las reseñas de HER especulan sobre el amor en el futuro y si será posible o no sentirlo y ser sentido por inteligencias artificiales. Personalmente creo que los motivos que llevaron a Spike Jonze a rodar su primer guión, tienen mucho más que ver con la configuración y las carencias que él encuentra en las relaciones amorosas del presente. Mi sensación es que HER no trata tanto de si seremos o no capaces de amar y ser amados por una máquina, sino de si seremos o no capaces de amar y ser amados por alguien que no lo sea.

El arte de Amar

Hace ya 60 años, Erich Fromm nos prevenía de que el verdadero propósito de su libro más célebre no era otro que tratar de convencernos de que todos nuestros intentos de amar están condenados al fracaso más estrepitoso. A menos que, del modo más activo, desarrollemos lo que él denominaba “la personalidad completa”, cimentada sobre cuatro pilares: humildad, coraje, fe y disciplina. “En una cultura en la cual esas cualidades (no sólo) son raras (sino que además se desincentivan –añado yo), también ha de ser rara la capacidad de amar”. Al psicoanalista alemán le bastan las 10 primeras líneas del prefacio para lanzar un torpedo a la línea de flotación de todas y cada una de las historias de amor que hemos visto y leído en centenares de títulos y escuchado en miles de canciones románticas…

Si quieres leer más, descárgate el PDFHER – El amor sin límites

Si quieres escucharlo:

Rubén Chacón Sanchidrián

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2 Comentarios

  1. No he visto la peli, pero he de reconocer que has suscitado en mi una curiosidad inmensa.
    En cuanto a lo de amar a alguien no humano, cada día nos acercamos más a ser nosotros mismos los androides, hay más conversaciones «románticas» por whatsapp que a la cara, no sabes si tienes un novio o un móvil que vibra o algo que vibra basta…jajajajaj
    Bueno, lo dicho que la veré porque después de leerte me ha encantado ya solo tu crítica-reflexión de la peli

  2. Excelente trabajo ! Saludos
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