Ali (2012)

Nota: 6, 5

Dirección: Paco R. Baños

Guión: Paco R. Baños, Rafael Cobos

Reparto: Nadia de Santiago, Adrián Lamana, Veronica Forqué, Julian Villagrán, Luis Marco

Fotografía: Álvaro Gutiérreza

Duración: 89 Min.

No son tiempos muy felices para un director español no asentado en la industria.  El que empieza a asomar la cabeza, lo tiene difícil: hay que superar las cada vez más estrechas vías de financiación y llamar la atención lo máximo posible para poder, algún día, seguir rodando. Paco R. Baños ha tenido que ir pasando de festival en festival con su ópera prima, “Ali”,  para que, un año después de sorprender en el Festival de Málaga, por fin pueda ver su película en los cines. Esperemos que el cuidado al estrenarla valga la pena económicamente, porque el film, sin ser una maravilla, es lo suficientemente bueno para que consiga ser el primero de una larga lista de su director.

Paco R. Baños, en realidad, ya tiene cierta experiencia en el sector: ha trabajado en equipos técnicos de varias películas, y ha escrito y dirigido sus propios cortos. Se nota que conoce las teclas que hay que ir tocando para llevar a la cámara hacia donde le interesa y que el material adquiera su propia idiosincrasia. En “Ali”, el director intenta desmarcarse de lo que se suele ver en el cine español, dando a su película un tono actual y alternativo sin necesidad de ser excesivamente realista. Álvaro Gutiérrez, director de fotografía que ya había demostrado sus habilidades en “Bajo las estrellas”, es capaz de encontrar la imagen indie que busca Baños. Acompañado de buena música, este aspecto natural y ligero les sienta bien a los personajes y a la historia, que no tienen necesidad de ahogarnos en sus emociones.

Como adelanta su título, el realizador andaluz construye la película alrededor de un personaje. Ali – Alicia- es una chica de 18 años, independiente y divertida, que vive con su madre y trabaja en un supermercado; tiene pavor a enfrentarse al  volante de un coche y a enamorarse de alguien. Así nos presenta una voz en off a Ali al principio de la historia.  La buena interpretación de Nadia de Santiago termina por darle personalidad y presencia a un personaje que es capaz de aguantar el peso de la película sin problemas.

Baños, como decía, no atosiga con el drama, sino que intenta contarnos con serenidad y sinceridad como su protagonista se ve influenciada por lo que le pasa y las personas que le rodean,  en un proceso que le hará madurar. Por eso, decepciona un poco que sus buenas intenciones y su, a priori, interesante personaje principal, terminen por tomar ciertos caminos que acaban siendo más monótonos de lo que se podría esperar. Los cambios interiores y exteriores de Ali, su evolución como personaje, pierden algo de fuerza en el desarrollo de un guión que en ocasiones confunde su valiente honestidad con previsibilidad narrativa.

A Ali le acompañan diferentes personas durante el trascurso de la película. Una relación clave es la que mantiene con su madre, encarnada por una recuperada Verónica Forqué que se siente cómoda con el personaje soñador y risueño que han escrito Baños y Rafael Cobos («Grupo 7»). Te quedas con ganas de verla interactuar más con Julián Villagrán («Extraterrestre»), que tiene contadas intervenciones, pero que con su Vicente aporta un punto diferente al ‘mundo de Ali’. Entre los otros actores jóvenes, Adrián Lamana también sabe estar a la altura en sus escenas con Nadia de Santiago.

“Ali” es curiosa y agradable, y aunque no termina de estar aprovechada, es una buena carta de presentación para que Paco R. Baños pueda seguir luchando en esto. Una demostración más de que estos profesionales que vienen del Sur (el propio Baños, Alfonso Sánchez o Alberto Rodríguez), si se les da la oportunidad, saben lo que  hacen.

Arturo Tena