Crónica desde la 62 Edición del Festival de Cine de San Sebastián (25 de Septiembre de 2014)

La séptima jornada de la 62 edición del Festival de Cine de San Sebastián prometía comenzar con el mismo buen sabor de boca que nos dejaron «Jauja» y «La Desaparición de Eleanor Rigby», y la verdad es que el arranque fue de lo más estimulante. En nuestra agenda, el jueves estaba marcado como uno de los días más interesantes del festival, debido a las proyecciones de lo último de Carlos Vermut después de su aclamada «Diamond Flash», de la última ganadora de la Palma de Oro en Cannes, y del último trabajo de la directora de «Tomboy». La perspectiva era de lo más alentadora, y la verdad es que el balance final fue bastante positivo.

Magical Girl (Carlos Vermut, Sección Oficial), por David Rubio Lucas

Magical Girl es una obra plagada de aciertos. El primero, una dirección sobria alejada de los modernismos imperantes en el cine actual, con el uso del plano fijo como principal herramienta para su narración. En segundo lugar, un elenco que en general raya a gran altura y en el que brilla como siempre un enorme José Sacristán. Y en tercer lugar, un guión que se mueve al impulso de hechos fortuitos, que van uniendo y entrelazando las historias de todos los personajes hasta formar un puzzle al que no le falta ninguna pieza. Cine español distinto, brillante, y por desgracia escaso.

Relatos Salvajes (Damián Szifron, sección Perlas), por David Rubio Lucas

Relatos salvajes se compone de 5 historias y una entradilla que, si bien no conforman una unidad argumental, comparten un espíritu de comedia fresca e irreverente. Tan pronto nos encontramos ante una secuencia con diálogos plagados de humor, como con otra de violencia extrema. Esta dicotomía que en ocasiones se muestra de forma brusca, es parte del éxito de la cinta. A pesar de que algunos relatos flaquean en la comparación, el resultado final consigue que el espectador dibuje una sonrisa permanentemente durante todo el metraje.

Winter Sleep (Nuri Bilge Ceylan, sección Perlas), por Carlos Fernández Castro

Estábamos avisados, «Winter Sleep» dejó boquiabierto a todo aquel que tuvo la oportunidad de verla en el pasado Festival Internacional de cine de Cannes. A estas alturas, las demostraciones de genialidad del director turco han dejado de ser una sorpresa, para convertirse en norma, y «Winter Sleep» mantiene el altísimo nivel de sus anteriores trabajos. Durante las más de tres horas de metraje, penetramos en un microuniverso compuesto de escasos personajes y menos localizaciones, pero repleto de largas conversaciones sobre la vida en pareja, las relaciones de amistad, la dignidad, el poder del dinero, y diversas cuestiones existenciales, que atrapan la atención del espectador como si fuera un personaje más de la película. Nuri Bilge Ceylan parece tener todo bajo control; desde el primer plano, teje una tela de araña a través de localizaciones recurrentes y composiciones sumamente cálidas, que invitan a no querer abandonar las vidas de Aydin, Nihal, Necla, Hidayet, Hamdi, e Ismael, incluso después de transcurrido su extenso metraje. Imprescindible lección de cine y de vida.

Bande de Filles (Céline Sciamma, sección Perlas), por Carlos Fernández Castro

En algún momento tenía que llegar el fin de esta magnífica racha de buen cine en San Sebastián. Después de la meritoria «Tomboy», muchas eran las esperanzas depositadas en el nuevo trabajo de Céline Sciamma. Sin embargo, «Bande de Filles» ha resultado fallida y decepcionante. La directora gala no acaba de encontrar el tono en su atípico retrato de adolescentes conflictivas, e incluso parece no marcar un rumbo definitivo durante las dos interminables horas que componen el metraje. Cabe destacar el magnífico trabajo de un reparto que no cuenta con un guión a la altura de sus posibilidades. El espectador acaba teniendo la sensación de haber asistido al planteamiento de numerosos conflictos, que no acaban de ser desarrollados como merecerían.

David Rubio Lucas y Carlos Fernández Castro

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